"La Estación Experimental es su gente. Este instituto sin gente, sin sus científicos, sin sus técnicos, sin sus trabajadores en general, sería un museo".
La valoración pertenece al ingeniero agrónomo Roberto Sánchez Loria, que esta semana asumió como presidente de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), entidad que el próximo 27 de julio cumplirá nada menos que 115 años. Tras reemplazar en su cargo a Juan José Budeguer, durante los próximos cuatro años Sánchez Loria comandará las riendas de la institución junto con Sebastián Budeguer como vicepresidente, y los vocales Catalina Rocchia Ferro, Juan Carlos Crovella, Bernabé Alzabé, José Linares, Francisco Estrada, Luis Umana, José Lobo Viaña y Pablo Padilla.
Con larga trayectoria como dirigente en la actividad citrícola de Tucumán y en el directorio de la Eeaoc, el flamante funcionario brindó una entrevista a LA GACETA, acompañado por el director técnico de la institución, Daniel Ploper.
"La Estación Experimental está en un muy buen momento. Pero siempre trato de dejar claro que esto no es producto de una situación especial, de un momento, o de algo instantáneo, sino que responde a un proceso de continuidad. Para llevar adelante ciencia y tecnología y poderla transferir, la continuidad es una condición fundamental", resaltó Sánchez Loria. "O sea -precisó-, no se puede improvisar a la vuelta de distintos directorios al frente de la institución. Los directorios tienen que tener el concepto claro de que el proceso de producción o generación tecnológica requiere de un tiempo ininterrumpido, entre otras cosas".
- ¿Cómo logra la Experimental mantenerse a la vanguardia durante tanto tiempo?
- Acá se ha venido trabajando bien, felizmente, los últimos años, los últimos bastantes años, diría, y eso se nota en lo que estamos generando, que es tecnología de punta que le va a ayudar mucho a Tucumán y también a otras provincias que están cerca de Tucumán y que pueden nutrirse del producto tecnológico de la Estación Experimental, a mejorar su productividad y a generar una situación de riqueza y prosperidad que va a ser bienvenida para las poblaciones de estas provincias.
- Siempre se habló del "modelo Estación Experimental" como un sistema exitoso, fundamentalmente porque la entidad funciona con participación pública y privada. ¿En qué consiste exactamente esa participación?
- Eso ha sido una idea brillante de Alfredo Guzmán, el creador de esta institución, que concibió el hecho de todo aquello que los gobiernos pueden ofrecer, que es, por ejemplo, estabilidad, proyección en el tiempo y una contención legal de una institución, que es la Estación Experimental, la tiene, pero advirtió de que la conducción, el fijar los objetivos de futuro, de presente y de futuro, para esta, era más una tarea del sector privado por los intereses que defendían y por la misma dinámica gerencial del sector privado. Esa virtuosa combinación es lo que ha permitido esta vida virtuosa de 115 años. Además, invitó al sector privado a aportar dinero para su propio beneficio, pero le dijo: los aportes que ustedes hagan acá los van a administrar ustedes. Este es otro concepto virtuoso.
- ¿O sea que la Experimental funciona como una empresa?
- Los que estamos en el directorio nos sentimos un poco dueños del dinero que aportamos y responsables, digamos, de su administración. Entonces lo hacemos de la misma manera que en nuestras actividades y somos cuidadosos en la aplicación de recursos. Obviamente, todo controlado por el Estado provincial, como debe ser, a través de sus servicios de auditoría, como es, por ejemplo, el Tribunal de Cuentas. El directorio siempre está compuesto por representantes de las distintas actividades, de los que aportan.
- Es evidente que hoy en día el término ajuste está instalado en la comunidad, en todos los sectores, a partir de este cambio de gobierno que hubo en Tucumán y en la Argentina. ¿Cómo impacta esta situación en una entidad que depende de alguna manera del Estado, de un Estado que busca achicarse?
- Tenemos una preocupación importante. Pero la Estación Experimental es su gente. Este instituto sin gente, sin sus científicos, sin sus técnicos, sin sus trabajadores en general, sería un museo. El capital número uno que tiene este instituto son sus tecnólogos, sus científicos, la gente que está en la transferencia tecnológica, la que hace servicios. Gente calificada, muy calificada, que nosotros tenemos la obligación de preservar dentro de esta institución. Vamos a hacer todo lo posible para ayudarlos, a nuestros técnicos, a nuestros científicos, a pasar estos momentos difíciles.
- ¿Han tenido contacto con el gobernador Osvaldo Jaldo?
- No hemos hablado todavía con el gobernador, pero lo vamos a hacer. La transferencia de la Estación Experimental a las empresas es valorada, no solamente en Tucumán, sino también en toda la región. No me imagino la producción agroindustrial sin un instituto de esta referencia y de esta calidad, porque la verdad es que a medida que pasa el tiempo la complejidad del proceso productivo es mayor. Hablábamos con Daniel (Ploper) sobre los ejes fundamentales que nosotros perseguimos acá, que son una producción sustentable, que es compleja, porque entra a jugar un factor que antes lo despreciábamos un poco que es el tema ambiental. Hoy tenés un problema, una plaga y no podés salir a aplicar cualquier cosa, no podés, estás limitado, tenés que aplicar aquello que tiene bajo impacto ambiental y tiene que estar probado y aceptado. No se puede producir, por ejemplo, una modificación genética de alta complejidad sin estar absolutamente encuadrado dentro de reglas duras.
- ¿Cómo están las empresas de la actividad agro-industrial en tiempos difíciles?
- Tenemos distintas situaciones. Te encontrás con una industria azucarera que ha pasado y está pasando un muy buen momento. Ha tenido muy buenos valores del azúcar, no tanto del alcohol, pero sí del azúcar, lo que le da una posición buena a la industria azucarera en general, y por supuesto que nos favorece a nosotros porque son nuestros principales aportantes. No ocurre lo mismo con la industria citrícola, que está pasando un momento difícil, que es complejo, porque ha tenido una caída muy importante de los precios industriales de referencia, por una consecuencia de sobreoferta. Esperamos que esta situación se vaya superando paulatinamente. En cuanto al mercado de fruta fresca, ha sido variable, pero muy impactado por la macroeconomía argentina, porque todo el proceso exportador es un proceso que está referido al dólar. Cuando se trabaja con dólares que no son del todo reales, que el gobierno fijaba, los costos en algunos momentos se desfasan con los precios que nos pagan. El mercado internacional también se ve afectado con la guerra de Rusia y Ucrania. Pero se está exportando mucho limón a los Estados Unidos.
Interacción con el mundo
La Eeaoc mantiene contacto permanente con instituciones internacionales, para aportar conocimientos y estar al tanto de la últimas novedades investigativas. El director técnico de la entidad, Daniel Ploper resaltó algunos de los avances logrados que trascienden las fronteras de la provincia. "En el tema de mejoramiento de caña de azúcar hemos hecho avances trascendentales. En cuanto a transgénesis en caña de azúcar, la Estación fue prácticamente la primera institución que obtuvo un transgénico y que hizo todos los deberes para desregularlo imponiendo una nueva normativa que no existía", subrayó. "Otro avance, por ejemplo, es que Sudáfrica y Bolivia están produciendo soja con variedades de la Estación, por las cuales cobramos regalías. También estamos percibiendo regalías por cañas de azúcar en Uruguay, y aspiramos a obtener regalías de provincias del norte argentino con nuestras variedades. En ingenios de Centroamérica estamos mandando equipos para todo lo que es la eficiencia industrial y eficiencia energética en particular", cerró Ploper.